5 de los K-Dramas más impresionantes visualmente

Apr 19, 2018

La cinematografía es vista como algo secundario en los K-drama, y tras el elenco y la actuación, es algo que pasa desapercibido. Hay, sin embargo, dramas que llaman la atención por su detalle y habilidad de que cada toma salte de la pantalla, atacando a los ojos con bellos escenarios, paletas connotativas, luz e imaginería emotiva. Vemos dramas coreanos por lo que tienen que ofrecer, pero en el caso de los siguientes dramas tendríamos que verlos de nuevo y solos para disfrutar de todo lo que nos tienen que enseñar visualmente.

Goblin

Del director de “Descendants of the Sun” (Lee Eung Bok), este drama fue uno de los más cinematográficos y visualmente impactantes que hemos visto en los últimos años. Elaborados platós, ricos en simetría y con detalles cuidadosamente manejados. Similar al estilo de las obras de Wes Anderson o Stanley Kubrik, la cámara se vuelve fluida con un buen uso de las tomas de seguimiento y de las panorámicas, para que ninguna escena se sienta estática y no se pierda ningún potencial. Cada escena está filmada desde al menos seis ángulos diferentes, y con el esfuerzo máximo para cada toma sea bella e interesante, incluido el uso de las transiciones para hacer que las tomas fluyan entre sí, lo que aumenta el impacto de una sola toma en la narración.

Vean debajo el primer episodio:

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The Legend of the Blue Sea

La secuencia de crédito de apertura de este drama lo dice todo, ya que mezcla las vidas de los dos protagonistas, uno humano en tierra y el otro una sirena en una fantasía oceánica. Las grandes ballenas azules y las medusas que se deslizan por los cielos de la ciudad pintan un telón de fondo con unos efectos visuales asombrosos y brillantes ¡y todo esto es antes de que comience el drama! Cuando la sirena de Jun Ji Hyun vive en la gran ciudad, tenemos tomas épicas de gran angular, no solo para mostrar la vulnerabilidad del personaje en un mundo que no conoce, sino también para mostrar la gran escala de los escenarios, los cuales hacen que “The Legend of the Blue Sea” sea algo internacional y de gran presupuesto.

Podéis ver la fantasía en el primer episodio.

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Cheese in the Trap

Los espacios estrechos y acogedores y los ricos colores otoñales crean una atmósfera que complementa perfectamente la narración y a los personajes de “Cheese in the Trap”. Aunque es menos épico en escala y maravilla visual que los dos programas anteriores de la lista, está compensado por el hermoso elenco y el estilo cinematográfico, en gran parte gracias a una paleta de colores nebulosos y a la iluminación de ensueño. También encontramos escenas nocturnas casi de neón en callejones estrechos y sinuosos salpicados con farolas de ámbar o tiendas de conveniencia azules llenas de productos.

Podéis ver el primer episodio debajo:

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Scarlet Heart: Goryeo

Para ser honestos, estar cerca de IU ya hace que obtengas una obra maestra visualmente hablando: “Scarlet Heart: Goryeo” realmente hace todo lo posible por demostrar esta teoría. Los dramas históricos son conocidos por sus magníficos paisajes, la creación de mundos llenos de gente, disfraces y accesorios de calibre real, pero “Scarlet Goryeo” casi hace que cada toma sea algo deslumbrante, destinado a ser visto y admirado.

Let’s Eat

Este drama muestra todo con una iluminación natural lavada; edición rápida y entrecortada y una actitud casual que lo hace que romper la cuarta pared o mostrar que tres minutos de mukbang descarado parezca totalmente normal. Esto se debe a que lo que llama la atención en “Let’s Eat” es la comida, ya sea en el centro del encuadre, en primer plano, empañado en vapor o cálidamente iluminado para realmente hacer que su estómago retumbe.

Ya sea adoptando diferentes estilos de cámara como a mano, o dividiendo la pantalla entre los personajes y su comida, el progama se ve genial. Los créditos de apertura parecen un anuncio comercial de un nuevo restaurante que se inaugura en la ciudad, y es muy posible que todo el programa sea una herramienta para lavarnos el cerebro y comprar comida coreana, pero no nos vamos a quejar, porque ha funcionado.