Song Il Gook está enamorado de Chu Sarang y en desesperada necesidad de tener una hija + Chu Sarang es una noona natural y comparte chocolates con los trillizos en Superman Returns

Como padre de tres hijos y ninguna hija, Song Il Gook se ha enamorado de Chu Sarang y se ha convertido en uno de sus ávidos seguidores en el próximo episodio de “Superman Returns”. Siempre estando al rededor de tres juguetones y activos chicos, la ternura femenina de Chu Sarang es completamente nueva para él.

En este episodio, Chu Sung Hoon realiza una fiesta para los trillizos y Sarang. Para la fiesta, Song Il Gook y Chu Sarang go va a una misión juntos a comprar lo necesario para la fiesta. Como Song Il Gook no habla nada de japones, Chu Sarang se convierte en la líder. A lo largo de su misión, Song Il Gook no puede esconder su sonrisa por tener a Sarang para él mismo.

Como mientras hablan, Song Il Gook baja su postura para sostener la mano de Sarang y cuando hace contacto visual, él se arrodilla para estar al mismo nivel que ella, lo cual hace que los espectadores piensen que él tiene una gran necesidad por tener una hija. Cuando ellos regresan a cada, Sarang mira a Song Il Gook y le da un fuerte abrazo, causando que él tenga una gran sonrisa en el rostro. Song Il Gook termina deseando en voz alto: “Quiero una hija justo igual como Sarang”, haciendo que los presentes rían.

En el mismo episodio, Chu Sarang ha a probado que ella es una noona natural por la forma que ella interactúa con los trillizos quienes la fueron a visitar a Japón.

Los espectadores deben prepararse para más ternura en la próxima emisión del 28 de diciembre de Superman Returns, pues Dae Han, Min Gook y Man Se continúan con su visita.

Pese a ser solo cinco meses mayor que los trillizos, Chu Sarang mostró que ella puede estar lista para ser una hermana mayor por la forma que ella cuidó de ellos.

Cuando los trillizos ingresaron a la sala de Chu Sarang, ellos se encogieron de miedo cerca al sillón luego de ver a las mascotas Kyoro y Buru. Chu Sarang observó con ansiedad a los trillizos llorando por miedo y los confortó, ella sacó la última arma: el chocolate. Ella se acerco y metió un chocolate a la derecha de la boca de Man Se, quien dejo de llorar inmediatamente por el sabor a dulce. Alentados por el chocolate, Man Se lloró en su adorable particular forma: “¡El perro no da miedo!”

Mira el 28 de diciembre a las 4:50 pm KST, la segunda parte de la visita de los trillizos en Japón a Chu Sarang.