6 impactantes cambios en los episodios 7-8 de "The Devil Judge"

Jul 31, 2021

Ya estamos en la mitad de “The Devil Judge”. Esta semana, es una guerra sin cuartel entre la élite y Yo Han (Ji Sung), ya que cada lado trata de superar al otro. Ga On (Jinyoung) sigue dudando de qué lado está, pero por fin ha llegado el momento de tomar decisiones, y ambos bandos aún tienen algunos ases bajo la manga.

Aquí están los cambios más impactantes de los episodios de esta semana.

Atención: spoilers de los episodios 7-8 a continuación.

1. El consejo de Sun Ah para las mujeres

Si la semana pasada nos dejó un vistazo a la psique de Sun Ah (Kim Min Jung), esta semana profundiza en qué (o más bien quién) la convirtió en la tigresa que es. Durante la conferencia que da en un centro para chicas con problemas, Sun Ah se sale del guion y se lo toma como algo personal. Nos presenta una imagen de su infancia llena de abusos y negligente: con una madre alcohólica que se convertía en un demonio cuando se emborrachaba, con hambre, robando para mantenerse, y con una trágica historia de fondo que parece explicar su carácter. Y lo que es peor, instruye con entusiasmo a las chicas para que consigan pruebas de cualquier manera posible cuando (¡no si, sino cuando!) sean agredidas sexualmente y atormenten a su agresor para siempre, porque a la policía no le importará.

Es terriblemente sombrío ver a las chicas sonreír y estar de acuerdo, como si ya hubieran experimentado lo feo que es el mundo y estuvieran agradecidas de tener indicaciones sobre cómo caminar por él.

Sin embargo, ¿hasta qué punto podemos confiar en lo que dice Sun Ah? Es conocida por falsear la verdad, como se ve en su interpretación de cómo se cayó del segundo piso de la casa de Yo Han. Además, la Sun Ah que Yo Han conoció era una chica manipuladora y medio loca para empezar. ¿Su madre murió realmente al “tropezar” por las escaleras? Sun Ah empuja al director del centro para chicas con problemas por las escaleras y su asesinato del presidente Seo (Jung In Gyeom) demuestran que nada de lo que dice puede tomarse al pie de la letra.

Lo que sí es seguro es que sus consejos a las chicas proceden de un lugar de conocimiento íntimo, porque el presidente Seo es su agresor sexual.

2. La muerte del presidente Seo

Puede que Sun Ah tenga a las personas más poderosas de Corea en la palma de su mano, pero antes era una joven que se abría camino en la escala corporativa de la Fundación y que llamó la atención del hombre equivocado. Ha utilizado a ese hombre como escudo para encubrir su verdadero papel en la Fundación durante años, pero ha comenzado un juego que merece ser descubierto, y eso significa que el escudo tiene que caer.

El Presidente Seo tiene poco más que lujuria en él. El hombre estaba tan entusiasmado con la idea de que Yo Han había creado una apertura para atacar a Sun Ah, que no vio que esa misma apertura le daba a Sun Ah vía libre para deshacerse de él. Apenas sabe nada de la élite mientras que Sun Ah ha estado involucrada en todas las empresas. Así, no es de extrañar que a la hora de la verdad, la élite lo descarte en favor de ella.

La escena está brillantemente interpretada, con una increíble actuación de Kim Min Jung. Sun Ah saca a relucir su venganza por última vez. Hay dolor y amargura en cada palabra cuando le pregunta al Presidente Seo por qué le hizo eso. Él se queja por última vez antes de que ella le clave la cuchilla, y por un momento vemos a la verdadera Sun Ah en toda su cruel dulzura: una mujer furiosa con el sistema que le ha fallado, pero condenada a repetir sus errores. Hay un orgullo feroz en sus ojos por haberle cortado al fin. Ahora, está lista para cazar.

3. El hombre en la celda

Ga On ha sido un personaje frustrante por su empeño en no ver más que el mal en Yo Han. Hay pequeños momentos en los que la luz brilla a través de las grietas y el hombre entra en razón, pero inmediatamente corre a Min Jung Ho (Ahn Nae Sang) o a Soo Hyun (Park Gyu Young), que enseguida se inventan razones para que desconfíe de Yo Han. Y lo que es peor, Ga On les hace caso en lugar de seguir su instinto, que lleva semanas gritando que Yo Han no es un mal tipo.

Yo Han se centra en el corazón de la disonancia cognitiva de Ga On. No se trata de que sus padres hayan sido estafados y, por tanto, él no quiera recurrir a trucos de estafador. Se trata de las mentiras que dejó que Min Jung Ho y Soo Hyun le alimentaran para seguir sobreviviendo. Tanto Yo Han como Ga On enterraron su rabia para sobrevivir, pero mientras Yo Han canalizó la suya en forma de venganza, Ga On la deformó en una ingenuidad que raya en lo insondablemente ridículo: un La La Land en el que todo y todos serán arco iris y sol siempre que se adoren las santas leyes y sistemas.

Pero ese engaño se basa en la ilusión de la justicia, y Yo Han la hace caer sobre la cabeza de Ga On. ¿El estafador que le quitó todo a sus padres? Se ha ido. Sustituido por un hombre envejecido que fue sobornado u obligado a sustituirlo. La fe de Ga On en el todopoderoso sistema finalmente se rompe, y él también. La furia justa que Soo Hyun le pidió que contuviera asoma su cabeza. Y Ga On finalmente se da cuenta de lo terriblemente equivocado que estaba en todo.

Sin embargo, como era de esperar, Ga On sigue desconfiando de Yo Han, preguntándose si está dirigiendo todo el asunto. Yo Han, por otro lado, está utilizando todos los medios que puede para atraer a Ga On a su lado, pero tal vez esté demasiado centrado en Ga On. Porque hay un tercer juez en ese panel, y él ya ha tenido suficiente.

4. Jin Joo pasándose al lado oscuro

La jueza Oh Jin Joo (Kim Jae Kyung) es una mujer inteligente y ambiciosa, y para ella es evidente que la están dejando de lado. Yo Han le confía todo a Ga On, pero absolutamente nada a ella. Esos dos están en su propio mundo, y ella ya está harta de estar fuera, mirando hacia adentro (probablemente una posición familiar para ella al crecer sin privilegios). Así que no es de extrañar que la oferta de Sun Ah le resulte tan fascinante.

Entre los muchos cambios que Sun Ah ha hecho al convertirse en presidenta de la Fundación, uno de ellos es ponerse a la cabeza del comité que supervisa la corte en vivo de Yo Han. Todavía no está claro si su intención es que Jin Joo espíe a Yo Han o que lo sabotee activamente (probablemente esto último), pero independientemente de la misión, Jin Joo está evidentemente dentro.

Pero Yo Han no la incluye por una razón. Mientras que Ga On nunca se ha sentido cómoda con los focos, Jin Joo los ha buscado activamente en todo momento. Hace lo que se espera: buenas intenciones, ayuda a la gente, etc., pero en algún lugar del fondo, anhela el poder y la atención y se le ha escapado en más de una ocasión. No hay nada malo en la ambición, pero siempre se pondrá del lado de la persona que le pueda dar más publicidad, como está ocurriendo claramente en este caso. Yo Han no quería a alguien indeciso, sino a alguien capaz de comprometerse, alguien que se enfade con el poder en lugar de dejarse llevar por él. Ga On encaja en el perfil, y Yo Han está haciendo lo que sea necesario para tenerlo.

5. Yo Han siendo transparente

“Si hay un diablo, es la autocompasión de los poderosos”. Estas palabras han sido la filosofía que guía a Yo Han. Yo Han nunca ha sentido lástima de sí mismo. Su rabia va directamente hacia afuera. Sabe exactamente cuándo cruzar la línea, cuándo merecer la ira de Ga On y cuándo no.

Puede que Yo Han se propusiera manipular a Ga On, pero rápidamente se ha encontrado volviendo al punto de partida para ganarse su confianza. Deja de mantener sus cartas cerca. Cuando Ga On llora, es como si no pudiera contenerse y le cuenta cómo se sintió cuando las élites irrumpieron en su habitación del hospital tras el incendio y le pidieron tierras y dinero gratis.

Ha hecho todo lo posible para mostrar a Ga On quién es y cuáles son sus intenciones. Como le dice a K (Lee Ki Taek), Ga On podría ser peligroso en el otro lado. En lugar de tener a Ga On a sus espaldas con un cuchillo, Yo Han lo quiere a su lado, o de lo contrario tendría que deshacerse de él por completo, lo cual es algo que Yo Han claramente no puede llevar a cabo.

Después de que incluso la corrupción del intercambio de prisioneros no lograra convencer a Ga On, Yo Han finalmente le muestra su círculo íntimo: K, el abogado Go (Park Hyung Soo), entre otros. Todos ellos han sido abandonados por el sistema que Ga On ha adorado durante tanto tiempo. Ga On intenta argumentar que sólo son personas que Yo Han compró, pero se queda callado por el trauma que han sufrido.

Yo Han espera pacientemente mientras Ga On realiza su propia investigación sobre el estafador que robó a sus padres. Descubre que fue Cha Kyung Hee quien organizó la liberación del estafador. Temblando, Ga On se enfurece con Yo Han (por milésima vez) y le pregunta por qué no se lo dijo antes. Yo Han le hace callar señalando astutamente que Ga On nunca le habría creído. Se desnuda (metafóricamente hablando) y dice que habría hecho cualquier cosa, incluso fingir el intercambio de prisioneros si eso significara tener a Ga On de su lado. Espera que Ga On vea por fin, que se libere de los ideales tóxicos que le han limitado durante tanto tiempo. Y oh, Ga On cumple.

6. Ga On eligiendo a Yo Han

El momento de la verdad ha llegado por fin. Sorprendentemente, es Min Jung Ho quien lleva las cosas a un punto crítico, exigiendo que Ga On se una a él y derribe el tribunal en vivo. Con todo lo que Ga On ha visto y oído hasta ahora, es imposible que esté de acuerdo. En lugar de sugerir que luchen contra la corrupción, o que derriben a la élite, Min Jung Ho argumenta que es la corte la que debe ser desmantelada, perdiendo por completo la raíz del problema.

Ga On señala (repitiendo como un loro a Yo Han) que no es que el tribunal esté instigando toda la locura que se está produciendo en Corea, sino que el tribunal (o Yo Han, en realidad) reaccionó ante un problema generalizado que todo el mundo sabía que existía y nunca hizo nada al respecto. Y jueces como Min Jung Ho son responsables de ese problema, por no hacer su trabajo y centrarse más en los puros ideales que en proteger a la gente con la ley.

Los verdaderos instigadores están ahí fuera, y quieren que la corte de Yo Han sea derribada. Seguirles el juego sería una verdadera bofetada a la memoria de los padres de Ga On. Por fin, Ga On se despoja de su manto de justicia y se adentra en la oscuridad. Como la luz era tan cegadora, nunca vio lo que escondía. Así, finalmente toma la mano de Yo Han y se prepara para luchar contra un mundo corrupto.

¡SÍ! ¡Ga On por fin ha visto la luz!

El avance de la próxima semana muestra que las cosas se vuelven mucho más oscuras, con Ga On sumergiéndose de lleno en la venganza y la lucha por la justicia. Sun Ah mejora su juego introduciendo un as en el tribunal en vivo en forma de Jin Joo. Cha Kyung Hee se enfurece cuando las élites cierran filas y la dejan fuera de juego. Soo Hyun se ha metido en una situación complicada, y ha puesto a Elijah en peligro al ser posiblemente la peor policía de la historia (que deja a un menor en silla de ruedas a dos metros de un tiroteo. Al menos debería haber pedido refuerzos y haberse quedado con Elijah en lugar de dejarla sin vigilancia).

Cada vez que parece que los lanzamientos no pueden ser más altos, llegan a las nubes. Pero Yo Han y Ga On están luchando juntos en este juego terriblemente injusto. Así que, ¡que empiece el juego!